Es el conjunto de acciones que favorecen el buen funcionamiento de la organización escolar, con sentido de unidad y con distintos grados de participación y responsabilidad, para alcanzar el fin de la educación en fidelidad a los valores evangélicos y carismáticos.
El carisma de la congregación: la caridad a imitación de Jesús Redentor, ilumina e impulsa la acción educativa e impregna la gestión en clave pastoral.
Contamos con un estilo educativo-pastoral fundamentado en la pedagogía de las Santas. Como la forma particular en que se llevan a cabo las prácticas pedagógicas y la vida institucional para alcanzar el fin de la educación.
Busca privilegiar el diálogo, la comprensión, la presencia animadora, el espíritu de servicio; resaltando los rasgos de la Pedagogía de María Bartolomé. Estos rasgos son:
La condescendencia: implica ponerse al lado del otro efectiva y afectivamente hasta llegar a su corazón, conocer y comprender la situación de vida concreta, para dar respuesta a sus necesidades (cfr. Esc. III 164; VC I 201).
La creatividad: lleva a buscar y utilizar los recursos que necesita la persona para su crecimiento y el desarrollo de su originalidad (cfr. Esc. III 646, 704; CF I).
La prevención: facilita las condiciones necesarias para alejar del peligro a la persona y procura criterios de discernimiento que le ayuden a enfrentar responsablemente su vida (cfr. CF 1; Esc. III 697).
La amistad: permite buscar el encuentro personal, cara a cara; se vive la amistad como el espacio concreto en el que la persona crece amada, sostenida, acompañada (cfr. Esc. III 165, 697; 1-16; VC I 22-244; 271-295).
La corresponsabilidad: nos comprometemos a orientar el protagonismo del alumno educándolo para que valorice sus capacidades y las ponga al servicio de un proyecto de vida, fundado en el amor, la solidaridad, el compartir a través de los gestos cotidianos.
Implican a todos los actores de la vida institucional, según su rol y función dentro de la comunidad educativa
La formación: incluye lo humano, técnico-profesional, cristiano y carismático, dando así cuerpo a la integración fe-vida. El P.E.I. y el P.C.I. deben desarrollarse desde una cosmovisión cristiana, haciendo una lectura humana y creyente de la vida institucional y del currículum y promoviendo una acción educativa (organización, contenidos, estrategias, evaluación, disciplina, etc.) inspirada en una concepción cristiana del hombre, de la vida y del mundo.
El acompañamiento: conlleva el “hacerse cercano al otro”, respetando la historia personal y comunitaria, los tiempos y procesos individuales, grupales e institucionales; valorizando lo genuino que hay en cada uno para ayudarlo a desplegar progresivamente su ser en desarrollo y consolidar su autonomía.
El compromiso apostólico: requiere orientar la acción educativa para que el hombre, sabiéndose conocido y amado por Dios y los hermanos en sus dones y límites, pueda abrirse y salir al encuentro de los más necesitados y transformarse en “operador de caridad”, en líder cristiano dentro y fuera de la comunidad educativa.
Campamento/convivencias
En el Colegio y la ciudad
Nivel Inicial
Campamentos/ Convivencias
En la ciudad
Nivel Primaria
Viaje a Molinari
"Construyendo puentes"
Primaria
Encuentro de Caridad
Pastoral de Jóvenes